Lo que llamamos vinyasa yoga se ha hecho muy popular hoy en día como actividad física, de alto cardio o gimnasia. Sin embargo, en la tradición del Yoga se entiende y se vive como una práctica espiritual, sagrada y de amor. Nos recuerda una verdad tan sencilla como profunda: la práctica de vinyasa yoga no solo se basa en secuencias preestablecidas sino también en el movimiento que nace del fluir energético.