Premio Yomiuri 1960
La mujer de la arena es una obra de un fluir imparable y poderoso, el de la arena que avanza metro a metro para absorber las cosas y los seres, envolviéndolos en un manto de olvido. Kôbô Abe plantea de forma intensa y precisa el conflicto del hombre enfrentado a sus propios límites, el sentido de una existencia encerrada en un universo dominado por la obsesiva presencia de la arena, el ritmo de su constante movimiento, su tacto y su sabor. Un mundo en el que no existe más realidad que la materia, que sólo se puede aprehender a través de una exacerbada sensualidad.