1950, Londres. Antonia y Conrad Fleming esperan a los invitados a la cena de compromiso de su hijo Julian. Sin embargo, la voz y la mirada de Antonia parecen veladas por el desencanto y la sensación, casi la certeza, de que, después de todo, las cosas podrían haber sido de otra manera... Así se abre el repaso por la historia de los veinte años del matrimonio Fleming, un viaje hacia atrás.